El pasado miércoles, cuando el reloj marcaba las 20:00 horas, un grupo de hermanos y hermanas junto a otro grupo de voluntarios de Protección Civil cargaron dos furgonetas que serán entregadas a nuestra hermana Macarena Arrufat García para su envío a Valencia.
Macarena tuvo la iniciativa de enviar ayuda a Valencia y, a día de hoy, lleva 11 tráileres fletados con todo tipo de materiales. Uno de ellos con la contribución que hicimos ayer desde nuestra Hermandad.
Por todo esto podemos afirmar que existen más de mil millones de razones para decir que existe el amor al prójimo, que existe la solidaridad en este mundo y que todo esto nos acerca más a nuestros Amantísimos Titulares.
7 Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios.
8 El que no ama, no conoce a Dios, porque Dios es amor. Juan 4:7–8
Gracias a todos por haber contribuido en esta campaña: desde nuestros voluntarios de la Diputación de Obras Asistenciales hasta los donantes que habéis llenado nuestra sede de la calle Gerona con amor y caridad. Desde los voluntarios de Protección Civil de Sevilla hasta los que estaban esperando la mercancía en Dos Hermanas para cargarla en el tráiler.
Por supuesto gracias a Macarena Arrufat y a toda su familia por esta iniciativa. Que el Santísimo Cristo de la Exaltación y Nuestra Señora de las Lágrimas os bendigan siempre.
Mañana continuará nuestro día a día en la Hermandad; por supuesto nos centraremos en el culto, la formación y la caridad.
Volverá la Misa de Hermandad, nuestros maravillosos cultos, el itinerario de formación cristiana, las atenciones en obras asistenciales, nuestros mayordomos continuarán en su diario de cuentas, los secretarios contactando con los hermanos, las distintas áreas de la Hermandad retomarán sus reuniones, etc.
Esta es nuestra Hermandad en su uso cotidiano, en su jerga diaria. Pero no olvidemos que todo esto que ha pasado y que ha sido extraordinario nos recuerda cuál es nuestro objetivo. Y esta puntual y triste adversidad con la que nos hemos topado nos pasa o puede pasar más de lo que pensamos. Aunque estamos seguro que, por nuestra Hermandad y por todos sus hermanos, se solventará como se ha hecho estos días. Porque no ha habido nada más que un solo sentimiento común en todos los que componen nuestra Hermandad: ayudar al prójimo.
Gracias, gracias, y mil millones de gracias por vuestra muestra de amor.
Y gracias, Macarena. Has dado ejemplo con tus actos.
Gracias.