Carta que nuestro Hermano Mayor dirige a todos los hermanos y fieles devotos de esta Archicofradía con motivo de la Estación de Penitencia que realizamos en la tarde del Jueves Santo.
Un año más, siempre nuevo, siempre distinto, con ilusiones renovadas, volvemos con nuestro rito de siglos heredado de nuestros mayores que nos transmitieron la fe. Comprobarás que todo está preparado, la túnica blanca símbolo de la pureza y el antifaz morado para recordarnos el acto penitencial que nos disponemos a celebrar, Buscarás y no encontrarás la que este año no se ha colgado pero la llevas en tu memoria. Contemplarás con júbilo la nueva túnica y la que poco a poco hay que alargarle el dobladillo.
Jueves Santo, día grande para la Iglesia, hacemos memoria de la institución de la Eucaristía, del Orden Sacerdotal, dia del amor fraterno, día de nuestra Estación de Penitencia donde peregrinamos a la Catedral para adorar en espíritu y verdad al Dios vivo y verdadero, día que presentamos a Cristo Exaltado como único salvador del mundo y a su Madre con llanto inconsolable sólo comprendido en plenitud por los que pasan por la dolorosa pérdida de un hijo.
Estamos en el año de la Oración, que mejor oportunidad que nuestra Estación de Penitencia para rezar. Rezar por tantas cosas por las que hay que dar las gracias y por las que hay que pedir para que se nos concedan. Rezar por las intenciones que nuestra Iglesia nos pide: por las vocaciones sacerdotales, para que el Señor Exaltado nos envíe buenos y santos pastores que estén al servicio de la grey; y por los frutos del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular que celebraremos a finales de año.
Recordarte que el viernes cinco de abril tendremos una donación de sangre en la sede donde te informaremos de las donaciones de médula , si puedes acude, ayudarás a salvar vidas, y a que en cada Lágrima derramada surja una nueva victoria de la vida.
Te deseo una feliz y fructífera Estación de Penitencia.
José García Rufo.
Hermano Mayor.
